Los primeros artesanos fueron los indígenas nativos, quienes utilizaban pigmentos naturales para teñir sus trabajos de tejido y cerámica, así como instrumentos musicales y objetos para uso doméstico y de caza.
El arte del tejido, desde sus inicios, ha utilizado la creatividad para confeccionar objetos. Con el tiempo, empezó a aportar practicidad a la vida cotidiana y más tarde se convirtió en una expresión artística.
Hoy en día, la artesanía brasileña es sumamente rica y, debido a su variedad y su representación folclórica, una de las más famosas del mundo. Ampliamente practicada en el país, esta actividad sostiene a muchas familias y promueve la sostenibilidad mediante diversas técnicas de aprovechamiento de materiales como cerámica, hojalatería, trabajos en cuero y cuerno, trenzados y tejidos de fibras vegetales y animales, tintura, madera, barro, arcilla, piedra, harina de mandioca y migas de pan, masa de azúcar y maíz.
Los trabajos van desde bisutería hasta colchas, desde bolsos hasta esculturas en madera, desde encajes hasta cerámica, desde pinturas hasta utensilios domésticos. Es un arte original y de alto valor cultural que se complementa con el turismo. Cada objeto cuenta historias, expresa sentimientos, tradiciones, creencias y experiencias de todos los rincones de Brasil. Aquí te presentamos los principales destacados de la artesanía de las cinco regiones brasileñas:
Norte
Los estilos marajoara y tapajónico, genuinamente indígenas con técnicas y formas milenarias, incluyen joyas hechas de semillas y metales preciosos, así como madera y metal. La influencia indígena en la Amazonia convierte a la cerámica en una de las producciones más representativas de la región.
Nordeste
Herencia de la colonización portuguesa, las técnicas de producción en fibras de algodón se conservan hasta hoy y se suman a los tejidos de paja y cestas hechas con carnaúba, bambú y bejuco. Además del trabajo en barro y madera, el Nordeste se destaca por la famosa renda de bilro, elaborada por las mujeres rendeiras en varios estados, principalmente en Ceará.
Centro-Oeste
En esta región, el bordado es prominente, así como las actividades relacionadas con madera, barro, tapicería y trabajos con frutas y semillas. En Mato Grosso, son comunes las figuras de animales en porcelana, mientras que en Goiás destacan las piezas decorativas hechas por indígenas de las aldeas Carajás, Caiapós y Xavantes.
Sudeste
Un tipo de artesanía destacada en la región son las llamadas “namoradeiras”, esculturas que hacen referencia a las mujeres del interior que se quedaban en la ventana observando el movimiento. Minas Gerais es conocida por sus tapetes y colchas tejidos a mano, así como por las piezas en estaño y piedras decorativas talladas en diversos tipos de minerales. En el interior de São Paulo, son comunes las ollas, los potes y las moringas de barro.
Sul
En el interior de Santa Catarina, se encuentran muchos productos hechos con hoja de plátano. En el litoral, en la región de Florianópolis, destacan el encaje y la cerámica de origen azoriano. En Paraná, hay mucha artesanía en madera. En Rio Grande do Sul, son comunes los porongos, productos rústicos utilizados para fabricar las cuías de chimarrão, así como las mantas y ponchos coloridos.
Para obtener más información sobre Brasil en general, viajes a Brasil, vacaciones en Brasil y turismo brasileño, visite también VBRATA Visit Brazil Travel Association.
Lea más sobre el estilo de vida latino e brasileño, viajes y turismo y la cultura brasileña a latina-americana en BBMag, la única revista trilingüe (inglés, portugués e español) con sede en Londres.